Ellos son Aliza y Miguel, una pareja que nos llegó al corazón y que nos pone una sonrisa en la cara cada vez que los recordamos.
Nos enseñaron que el amor no entiende de raza, de religión, de idioma ni de cultura. Trajeron invitados de todo el mundo, ¡hasta 24 países estaban representados en la boda!
Pasamos con ellos dos días de muchísimo amor. Primero celebraron una una boda Hindú la noche del viernes rodeados de su familia más cercana en un entorno de lo más sevillano, con la Torre del Oro y el rio Guadalquivir de fondo. Aliza es una enamorada de la naturaleza de nuestra tierra, y lo que más deseaba era celebrar su boda en un espacio muy andaluz. Así que al día siguiente, en una hacienda llena de olivos, en un rincón íntimo, celebramos su ceremonia llena de muchos amigos que nos hicieron llorar y reír a carcajadas a todos con sus anécdotas y palabras de cariño a la pareja. Bailaron, comieron y lo celebraron hasta el amanecer.
Ellos son verdadero LOVE A TOPE! 🧡 Son guapísimos por fuera pero ni os imagináis cómo lo son por dentro!